Cinema Chile

¿CÓMO PARTICIPAR CON TU ÓPERA PRIMA EN MERCADOS O FESTIVALES INTERNACIONALES? : ALBA GAVIRAGHI, FELIPE CARMONA Y DIEGO CÉSPEDES NOS DETALLAN EN EXCLUSIVA LOS PASOS Y RECOMENDACIONES A SEGUIR EN EL MARCO DEL FESTIVAL DE SAN SEBASTIÁN

septiembre 19, 2022

Durante los primeros días de la 70° edición del Festival de San Sebastián, Chile ha tenido una gran presencia en España. Las distintas producciones y proyectos presentes tanto en secciones oficiales como en el mercado han tenido gran éxito y  también se destacan al iniciar su recorrido con sus óperas primas en San Sebastián y otros por su amplia trayectoria anterior en festivales y mercados internacionales. Esto sin duda abre el camino y es una motivación para el surgimiento de nuevas voces.

Tuvimos la oportunidad de entrevistar al director Diego Céspedes, quien participará de la sección Zabaltegi-Tabakalera con su nuevo cortometraje Las criaturas que se derriten bajo el sol también  a la directora Alba Gaviraghi presente en industria con su ópera prima Hijas únicas  y al director Felipe Carmona, que participará en Wip Latam con su largometraje Penal Cordillera.

A través de esta guía práctica dividida en 3 grandes pasos, podrás enterarte en exclusiva de las distintas etapas en las que se encuentran y el procedimiento para promover y estrenar sus   proyectos en encuentros internacionales.

¡Te invitamos a sumergirte en el proceso creativo y de distribución a través de esta nueva entrevista exclusiva que hemos preparado para ti!

 

 

Las primeras instancias de industria, en encuentros internacionales, es uno de los factores más importantes para comenzar a conocer los potenciales inversionistas y coproductores internacionales.

Hijas únicas de Alba Gaviraghi  comenzará su recorrido en mercados en San Sebastián.

El largometraje es  su ópera prima  y anteriormente tuvo la oportunidad de participar en el laboratorio Catapulta de FICUNAM (México) y  luego en CinemaChile Market Lab, donde obtuvo el premio a mejor proyecto de cine para asistir al Industry Club de San Sebastián. El largometraje seguirá su recorrido en Next Gen Fin Film Lab de EGEDA y para Octubre en Encuentros Australes del Festival Internacional de Valdivia.

“En aquellas instancias abrumadoras como los mercados y lugares llenos de personas de todas partes del mundo, lo único que  puede ser un refugio y una herramienta, es ser honestas e intuitivas con la película y con nosotras mismas.”
¿Cómo vives la experiencia de participar en San Sebastián con tu ópera prima?

Estoy contenta y expectante de que el primer mercado en el que se promueve Hijas únicas sea San Sebastián. Creo que la industria hispanoparlante y latinoamericana que allí se reúne, tiene un perfil ideal para ser los socios de la película, por lo que esperamos sumar en esos días un socio español y mexicano, mientras surgen nuevas colaboraciones con otras latitudes.

¿Qué sientes que aportaron al proyecto, y a ti como realizadora instancias anteriores de industria y también laboratorios como CinemaChile Market Lab?

Aportaron mucha claridad temática al proyecto. Pude sentir que colegas nacionales se interesaban en él y se les hacía empático.

A su vez, también sucedía lo mismo con personas de otros países como Francia y México, que se pudieron conectar e interesarse en un mundo tan aparentemente local y particular como el fenómeno pingüino y pokemón. Eso fue alucinante y muy motivador.

¿Cuáles han sido los desafíos durante el desarrollo de Hijas únicas

Uno de los desafíos más grandes ha sido comenzar a armar equipo. Una vez se arme un equipo sólido, tanto en producción como en los roles artísticos fundamentales y el elenco, sin duda queda el desafío más grande: hacer la película. Algo que en sí mismo es difícil y enormemente gratificante a la vez.

¿Qué le podrías recomendar a otras directoras que comienzan su carrera en instancias de industria con sus óperas prima?

Hay dos cosas que se dicen mucho de la ópera prima nacional y que me gustaría problematizar. Primero, que las óperas primas suelen querer hablar de muchos temas, sentimientos y emociones como si fuera la única oportunidad de hacer una película en la vida. Considero que esa pulsión es buena pero siempre hay un llamado a medirse y concentrarse artísticamente entendiendo la pieza más allá de nuestras propias autorías.

También se dice que cuesta mucho levantar financiamiento con óperas primas y confirmo que es un desafío enorme, pero no hay película de cine de autor que no sea difícil de financiar así que es un punto que no debería desanimarnos.

 

Una de las etapas que también requiere con un gran proceso de preparación es la postproducción y la búsqueda de festivales para realizar la tan esperada world premiere. Penal cordillera es la ópera prima del director chileno Felipe Carmona, que ya ha tenido un extenso recorrido en 5 mercados desde el 2017, participando y siendo premiado en : Bafici Bal en Buenos Aires, Fid Lab Marseille en Francia, Sanfic Industria en Chile y en el mercado del FICG en Guadalajara.

Además en el año 2019 fue el único proyecto seleccionado por la Fundación Carolina, obteniendo una residencia en Madrid para así terminar el proceso de escritura junto a asesores expertos. Luego de este recorrido, Penal Cordillera obtuvo el fondo de coproducción con Brasil y finalmente Ibermedia.

“Para una ópera prima es fundamental diseñar el camino, saber a qué mercado asistir. No es lo mismo aplicar a uno u a otro, por eso hay que estudiar las rutas de otras películas que uno sienta que tienen afinidad con la nuestra. Estudiar el recorrido que hicieron y a la vez entender que los mercados cambian año tras año”
¿Cuál ha sido tu principal desafío en Penal Cordillera a nivel de guión y dirección? 

A los actores les propuse abordar a los personajes sin maniqueísmos ni estereotipos, dándole cabida a la humanidad de aquellos monstruos. En las primeras lecturas de guión conversamos mucho, estábamos construyendo en una línea muy delgada, y muchas veces antes de filmar alguna escena compleja, nos demoramos más de la cuenta porque el elenco se cuestionaba ciertas cosas. Ese proceso creativo algo incierto, finalmente ayudó a lograr actuaciones que son realmente notables.

Pero yo como director y guionista debía estar preparado para responder en cualquier momento y para eso me ayudó mucho conocer mi guión al revés y al derecho, porque aunque todo diálogo o escena se pueda modificar en el mismo set, hay un esqueleto tan sólido que a uno le permite lidiar con eso, estar abierto al cambio que propone un actor o defender tu idea.

¿Qué sientes que han aportado al proyecto instancias de industria anteriores?

Muchísimo. Creo que no hubiésemos podido filmar la película sin el desarrollo fuerte e inteligente que hicimos junto a Omar Zúñiga, Coto Naranjo y Dominga Sotomayor de Cinestación. Desde que decidimos presentar el proyecto en el Bal de Bafici el 2017, tuvimos un afortunado recorrido en donde la propuesta del guión y la estética llamaron mucho la atención, sobre todo en el extranjero.

Allí fuimos conociendo nuevos socios que se nos unieron en el camino como nuestros coproductores en Brasil, en Fid Lab Marseille pudimos conocer a nuestros agentes de ventas que residen en Francia y estamos muy felices de colaborar con todos ellos. Sentíamos que la película cada vez iba adquiriendo mayor peso a medida que daba un paso más en las instancias de industria y se volvía más sólida para la etapa de rodaje.

¿Podrías resumir en 3 hitos el proceso de creación de una ópera prima?

 

Dar con una historia que en tu interior sea innegable de ser filmada. No hay nada más maravilloso cuando llega el día en que esa imagen que has tenido por años en tu cabeza, la ves a través del visor en el set con tu equipo y tu elenco.

 

Poder llevar esa historia a un guión sólido. Cuando uno encuentra eso, independiente de la forma en cómo esté escrito el guión, si es más o menos convencional, llega el día en que el guión te habla de alguna manera y te dice, okey, estoy listo, vamos a filmar.

 

Dar con los productores adecuados que realmente quieran filmar tu película,poder descubrirlos, descansar en ellos, que vayan un paso adelante tuyo y te den libertad absoluta en lo creativo. En ese sentido Omar y Dominga para mí han sido como dos angelitos.

 

¿Qué le podrías recomendar a otros directores que comienzan su carrera en instancias de industria con sus óperas prima?

Son muchas cosas. Primero que desarrollen un buen storyline, un mejor tratamiento y una carta de intención que al leerla sea innegable que tienes que filmar esa historia.

Segundo, que devoren todo lo que encuentren sobre los procesos de otras películas que les hayan gustado o que sientan que tienen similitudes con las suyas.  Estudien su desarrollo, lean los créditos en donde salen las instancias de mercado e industria y laboratorios en donde se forjaron, busquen entrevistas de sus directores y productores.

Y tercero y lo más importante: paciencia y perseverancia. He visto películas hermosas en desarrollo que se caen por uno u otro motivo que es desalentador, pero a la vez no conozco a nadie que no haya seguido luchando por filmar su película y que no lo haya logrado.

 

Sin duda una de las etapas finales para todos los proyectos es la participación y selección en distintos festivales a nivel internacional. En esta línea, Diego Céspedes nos da varias pistas.

Su segundo cortometraje Las criaturas que se derriten bajo el sol, sin duda, ha tenido un gran recorrido y reconocimiento internacional durante este año, pasando por el Festival de Cannes y hace unas semanas por TIFF, además, el director cuenta con la experiencia reciente de su paso con su ópera prima La misteriosa mirada del flamenco en el Festival de Venecia.

“No hay necesidad de preparar un discurso o de saber exactamente lo que le dirás a un productor, hay que dejar que la conversación sea fluida, pero si conociendo las reglas, saber lo que busca la otra persona y saber escuchar»
¿Cuáles fueron tus desafíos en Venecia con tu ópera prima?

Nosotros fuimos en búsqueda de la última parte de financiamiento y los últimos detalles que tienen que estar listos para la pre-producción, entonces llegamos bastante seguros. El largometraje ha tenido un recorrido exitoso en otros festivales, con muchos laboratorios y residencias, que nos han otorgado una experiencia interesante para saber como funciona esto.

¿Qué ha sido lo más difícil durante el proceso?

La experiencia ha sido muy fluida, porque uno va acostumbrándose a los timing, a las reuniones. Entonces, uno sabe a lo que va y la gente que está en el mercado o festival ya sabe qué preguntarte. Es una experiencia sincera con lo que uno necesita y por sobre todo práctica, donde uno no tiene mucho que pensar.

Uno de los puntos claves es la experiencia de los productores, ellos me han ayudado y  guiado en el camino. A mí me preguntan de qué se trata la película y por qué, yo respondo esas dos preguntas y me muevo en explicar la parte artística del proyecto, pero son mis productores los que están ahí para explicar la parte más dura.

¿Cómo has vivido la experiencia anterior y durante este año el paso por 3 festivales? 

Mis dos cortometrajes han tenido la oportunidad de estar en festivales como Cannes y San Sebastián. Todos estos festivales grandes tienen su respectivo mercado, entonces, es muy bueno entrar en estos mercados y festivales cuando tienes un proyecto, ellos están esperando apoyarte. En ese sentido apoyan al autor desde el comienzo, e incluso te ayudan a desarrollar la siguiente, todos los festivales están en esa misma línea.

Es muy probable que si tu fuiste a Cannes con un cortometraje, puedas participar de otras instancias de desarrollo en Cannes y lo mismo con San Sebastián. Hemos ido teniendo esa continuidad con estos dos festivales y ha sido muy fructífero, me han ayudado a adquirir bastante experiencia en un periodo de cuatro años, donde ahora todo se torna más fluido y ya no nos damos tantas vueltas.

¿Qué le podrías recomendar a otros directores que comienzan su carrera en festivales con sus óperas prima o segundas producciones?

Yo creo que lo principal es no prepararse tanto. Un error común es prepararse mucho, tienes que ir conociendo tú película, mientras la conoces todo lo demás será fluido.

Todos buscan algo en particular, un productor no viene sin saber lo que quiere encontrar en un mercado, entonces uno como director también debe saber lo que busca, si abres ese espectro, ya todo es más fácil. Nosotros en Venecia con mi ópera prima estábamos en búsqueda de distribuidor, entonces lo primero que planteamos en las reuniones era el estado del proyecto y qué es lo que necesita, y así no nos damos unas vueltas enormes, las reuniones se vuelven más cortas, más atractivas y podemos estar más relajados.